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Escrito por Luis Roca Jusmet
Michel
Foucault, en un estudio pionero y radical, nos explicaba todo el proceso de transformación que va desde la locura a la enfermedad mental. El
loco, como fenómeno social va dejando de existir y en este proceso ha perdido lo que lo hace humano, su subjetividad. En esta línea podemos situar el terrible escrito autobiográfico del filósofo Louis Althusser ( "El porvenir es largo") en el que exige ser juzgado por la muerte de su amante. Lo que pide es ser considerado un
sujeto al que se le ha de atribuir la
responsabilidad de un acto. Atribuirle
la responsabilidad quiere decir que es él el ha de responder de su acto y se le ha de juzgar por ello, aunque sea para considerar que en aquel momento no era consciente de lo que hacía ; y desde aquí considerarlo culpable o no culpable penalmente.
Lo que le resultaba absolutamente intolerable es que lo hicieran desparecer como sujeto,que quedara convertido en un objeto al que se le encierra en un hospital.
Cuando los discursos bienintencionados, ideológicamente correctos, nos piden
que entendamos que los esquizofrénicos son enfermos y que hay que tratarles como a un diabético ¿ no
hay también una lógica de cosificación
en la que el sujeto ezquizofrénico acaba perdiendo su subjetividad ? Porque si un diabético existe como un sujeto cuyo cuerpo padece una
enfermedad ¿ Que es lo que queda del sujeto cuya propia subjetividad se
considera enferma y se le niega lo que nos hace humanos, que es la
responsabilidad de nuestra conducta ? ¿ Que pasa cuando no diferenciamos entre
la enfermedad que afecta al organismo y la patología que afecta al psiquismo?. El discurso psiquiátrico dessubjetiviza al enfermo mental.
Pero hay un discurso singular, diferente
del psiquiátrico, el psicoanalítico, que tiene algo que decir sobre la locura y
su posible relación con la filosofía.El padre fundador, Freud tuvo una relación problemática pero
interesante con la filosofía. En su juventud asistió a los cursos de Franz
Brentano, peso pesado de la filosofía de su época, y adquirió una formación
básica pero rigurosa y sólida. Pero Freud desconfiaba de la filosofía a la que
consideraba pura especulación. O incluso peligrosa, ya que se negó a leer a
Nietzsche para no ser influenciado por él. Su formación científica era la
determinante y aquí enmarcaba su proyecto. ¿ Cómo relacionó sus trabajos sobre el psiquismo humano con la filosofía ? Dijo algunas cosas interesantes :
1) La filosofía es la pretensión narcisísta de
un saber absoluto. Y ya sabemos que las patologías narcisistas para Freud están
ligadas a la psicosis.
2) Hay un peligro de deriva psicótica en la
filosofía porque su discurso es la cristalización ilusoria de un ideal, es un
documento del deseo. Hay un vínculo entre el mecanismo especulativo de la
filosofía y el de la paranoia ( caso Schreber) . Se reconstruye el mundo a
través del discurso para poder vivir en él.
3) Hay un cierto delirio en la percepción de las ideas como omnipotentes que llevaría
a un cierto animismo.
Con
Freud hay un desencuentro con la
filosofía y no entra directamente en el tema de la psicosis, mantiene una cierta distancia con ella.El psicoanálisis funciona bajo
transferencia y ésta solo es posible en las neurosis. Pero Freud analizará en
un texto las Memorias de Schreber,
caso excepcional de discurso delirante de una paranoia aparecida muy
tardíamente. Y aún con sus errores este texto será la base de toda la
teorización y el tratamiento de las psicosis, como mínimo la más paradigmática,
la paranoia.Desde aquí habría otra via
para tratar el caso Althusser, ya que él mismo se presenta implícitamente como
un psicótico y trata su discurso y su obra como algo ligado a su vida.
Podríamos volver aquí a Foucault cuando plantea que la locura de Nietzsche pertenece
a su obra pero como su aniquilamiento, es el momento en que el martillo se le
cae de las manos.
Pero estamos hablando indistitntamente de
locura y de psicosis y quizás no son lo mismo en el discurso psicoanalítico.
Sigamos otras vías posibles desde el psicoanalista francés Jacques Lacan.
Lacan es el buen encuentro entre la filosofía
y el psicoanálisis. Encuentro fecundo pero fallido, como todo encuentro
interesante. Lacan se forma en el privilegiado grupo de Kojéve y recicla todo
lo que puede de sus filósofos contemporáneos: Bataille, Heidegger,
Wittgenstein. Devora a los clásicos como Platón, Kierkegaard, Kant, Descartes,
Marx... y discute con Merlau Ponty, Jean Hypolitte..
Lacan, por otra parte, se enfrenta teórica y
prácticamente a la paranoia. Desde siempre, desde su época pre-freudiana Lacan
está interesado por la paranoia.Su tesis doctoral, escrita en 1932 ( tenía 31
años) se llamó De la psicois paranoica en
sus relaciones con la personalidad. En su retorno a Freud planteará un
desarrollo crítico sobre la base del texto freudiano sobre Schreber. Su Seminario III ( 1955-6) se llamará Las psicosis y uno de los textos de sus Escritos se llamará De una Cuestión preliminar
para un tratamiento posible de las psicosis. En otro texto, que ya hemos
citado, Sobre la causalidad psíquica,
se enfrentará a las hipótesis organicistas sobre la locura de la psiquiatria
dominante.
Desde una perspectiva lacaniana hay una diferencia radical entre locura y psicosis. La locura es un fenómeno y la psicosis una estructura. Es decir, que
la locura es un fenómeno que puede corresponder a cualquiera de las estructuras
clínicas señaladas por Lacan ( psicosis, neurosis, perversión). En este sentido
no sería ni lo mismo que la psicosis ni tampoco un fenómeno específico de ella.
Dice Lacan: “Lejos de ella/la
locura/sea un insulto para la libertad, es su más fiel compañera, sigue su
movimiento como una sombra/. Y el ser del hombre, no sólo no puede ser
comprendido sin la locura, sino que no sería el ser del hombre si no llevara en
sí la locura como el límite de su libertad? “